me persiguió
que porque la falda corta sobre dos ruedas
que porque sí
que porque yo lo provocaba con el pedaleo
que porque sus llantas eran más potentes que las mías.
y me dijo de cosas en el alto, si hubiera podido, hasta me las susurraba, permitiendo que su saliva me penetrara por la oreja. (¡qué asco!)
yo, mirada al frente. si haces como que no existe, tal vez no existe.
y me persiguió
y me dio alcance cuando yo bajé la velocidad
y me agarró la nalga izquierda, ahora mancillada con un calor de pena ajena que no puede con ella.
porque él se creía con el derecho de agarrármela porque yo traía falda en bicicleta
porque él es de un género que cada vez me da más vergüenza.
(que ganas de andar en pelotas sobre la bici)
(y no, no era Hércules sobre la que montaba, era Entropía... quizá por eso...)
4 comments:
Y si a tí te avergüenza, imagínate a (algunos de) los de mi género cuando vemos a un primate así... Hasta para ser patán hay qué tener clase. Las mujeres han evolucionado más. La ausencia casi total de vello, las acerca más al ángel que al simio que nosotros traemos a cuestas.
Y eran rosas.
Te aseguro que yo no fui, nos acordaríamos con menos pena. Me gusta tu blog, escorpiona. Un abrazo.
yo también la he visto azul jacaranda pasar bajo mi ventana de la Cibeles pero como no traigo bicicleta ganas me daban de alcanzarla corriendo...chin se me adelantaron :)
Post a Comment